Si quieres saber cómo mejorar tu salsa carbonara para pizza, ¡Este es tu sitio! Te contamos los trucos definitivos para elaborar la mejor salsa carbonara al estilo italiano.
Y si te quedas con ganas de más, no te pierdas este otro post con otros 3 tipos de salsas para pizza que tienes que probar, sí o sí.
La Salsa Carbonara Auténtica: Sin nata, por favor
La pizza tiene un lugar especial en los corazones de personas de todo el mundo, y en muchos de ellos, la pizza con salsa carbonara se encuentra en el top 3 de sabores de pizza por excelencia.
Aunque en España se ha mantenido durante mucho tiempo la creencia de que la salsa carbonara para pizza o pasta se elabora con nata. Lo sentimos, pero si buscas la receta de salsa carbonara definitiva, debes saber que no, la salsa carbonara no lleva ni nata ni ningún otro lácteo. Sus ingredientes se resumen en cuatro: Huevo, panceta, sal y pimienta. Aunque también se añade queso para aumentar su cremosidad.
Tips para preparar la mejor salsa carbonara para pizza
Si quieres elaborar auténtica salsa carbonara para pizza (sin nata) sigue estos consejos. ¡Gozarás a lo bestia con esta receta de salsa carbonara!
Elige una buena base para pizza
Para conseguir una pizza con salsa carbonara deliciosa, comienza con una base de masa de pizza de calidad. La masa fina y crujiente es una excelente opción para equilibrar la salsa carbonara, algo más pesada.
Utiliza panceta de calidad
En lugar de usar bacon o tocino ahumado, opta por el guanciale si es posible. Este ingrediente curado italiano aportará una profundidad de sabor auténtico. Corta el guanciale en trozos pequeños y fríelos hasta que estén crujientes antes de agregarlos a la pizza. ¡Notarás la diferencia!
No hay salsa carbonara para pizza sin huevo
Para elaborar salsa carbonara, bate huevos frescos (a ser posible ecológicos) en un recipiente y agrega queso Pecorino Romano rallado. Este queso es fundamental para el sabor característico de la carbonara. Combina los huevos y el queso en una mezcla suave antes de incorporarlos a la pizza.
Sal y pimienta
El toque de pimienta negra es esencial en esta salsa carbonara tradicional. Agrega un toque generoso de pimienta recién molida para realzar los sabores y darle un toque picante a la pizza.
El embutido que hemos utilizado ya añade un toque salado, pero necesitarás ajustar el sabor que buscas añadiendo un poco de sal. Mejor poco a poco e ir probando, que pasarte desde el principio y que tu salsa quede salada.
La temperatura del horno
Cocina la pizza en un horno bien caliente, que sea de piedra es lo ideal, así conseguirás una base más crujiente y una cocción uniforme.
Puedes agregar la mezcla de huevo y queso en el centro de la pizza justo después de sacarla del horno, permitiendo que el calor residual de la pizza cocine la salsa ligeramente. Aunque si la aplicas antes del horneado, también quedará espectacular. Eso sí, si has frito antes la carne, cuidado con que no se pase.
Después de sacar la pizza del horno, puedes agrega un poco más de queso Pecorino Romano rallado y pimienta negra recién molida.
Al seguir estos trucos italianos auténticos, podrás crear una pizza carbonara que respete la tradición italiana. La autenticidad y la simplicidad de los ingredientes te permitirán disfrutar de la rica esencia de la salsa carbonara sin la necesidad de nata.
Una alternativa de salsa carbonara para pizza con nata
Si prefieres el sabor de la salsa carbonara para pizza con nata, te sugerimos añadir también un poco de cebolla. Este ingrediente aporta siempre un toque exquisito a las salsas blancas y liga perfectamente con la carbonara.
Ingredientes
Mantequilla, panceta, mantequilla, cebolla, queso parmesano rallado, 100 ml de nata líquida, 4 huevos, pimienta y sal. (También puedes añadir champiñones)
Paso a paso
- Corta en trozos la panceta y la cebolla
- En una sartén añade una cucharada de mantequilla y dora la panceta. Reservamos.
- En la mantequilla o aceite sobrante, ponemos la cebolla y dejamos a fuego lento para que se poche. Añadimos sal y pimienta a la cebolla ya pochada.
- Agregamos el queso y la nata. Dejamos que se haga a fuego lento.
- Añadimos los huevos batidos poco a poco, sin dejar de mover, para que no se cuajen.
- Echamos la panceta y la dejamos un poco más a fuego lento para que todos los ingredientes se integren bien.
La historia de la salsa carbonara
Aunque la fecha y el lugar exactos del origen de la salsa carbonara son difíciles de determinar, se cree que su desarrollo está vinculado a la región italiana de Lacio, aunque más específicamente a Roma.
- Una teoría sugiere que la salsa carbonara deriva de los «carbonari», un grupo de trabajadores de las minas de carbón en la región de Lacio. Se dice que preparaban este plato en las minas utilizando ingredientes simples y fácilmente disponibles como el huevo, el queso Pecorino Romano y la panceta. La mezcla de estos ingredientes formaba una comida energética y satisfactoria para los trabajadores.
- Otra teoría apunta al período de la Segunda Guerra Mundial. Se dice que los soldados estadounidenses que ocupaban Italia durante la guerra introdujeron la pasta y el bacon a los lugareños. La combinación de estos ingredientes con huevos y queso creó lo que hoy conocemos como salsa carbonara. Sin embargo, algunos puristas consideran que esta teoría es menos auténtica debido a la ausencia de ingredientes italianos tradicionales.
- Una teoría más tradicional se centra en los pastores de la región. Se dice que esta receta nació como una comida para los pastores que necesitaban una comida abundante y sustanciosa mientras cuidaban su ganado en las montañas. La combinación de huevos, queso y panceta, fácilmente transportables, resultó en la creación de una salsa cremosa y rica que posteriormente se incorporó a la pasta y a la pizza.
Independientemente de su origen, hoy en día la salsa carbonara es un pilar en los menús de restaurantes italianos y se ha adaptado en todo el mundo con todo tipo de variaciones. Ya sea preparada con rigurosidad tradicional, o con un toque más moderno y original.
