Como pizzería italiana, en el post de hoy te damos las claves para preparar tu propia salsa de tomate para pizza.
Saber cómo preparar salsa de tomate para pizza es esencial para elaborar tus propias pizzas caseras y que estas estén de rechupete. Además, hacer tú mismo la salsa de tomate para tus pizzas, es sencillo, económico y el resultado es sencillamente delicioso, mucho mejor que echarle tomate frito envasado.
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¡Toma nota, porque después de leer este artículo tus pizzas caseras ya nunca volverán a ser las mismas! ¡Todos alucinarán!
Tips para elaborar una buena salsa de tomate para pizza
No cualquier salsa de tomate es una buena opción para ponerla sobre la masa de tus pizzas caseras. La principal diferencia con otras salsas similares es que la salsa de tomate para pizza se busca que sea más densa, es decir, con menos contenido de agua. De esta manera conseguimos que la masa no se humedezca mucho y no perdamos ese toque crujiente que tanto nos gusta en Tradizione Italiana Granada.
Así que si quieres preparar una pizza de masa fina, crujiente y tostada por fuera, elige una salsa de tomate concentrada. Un buen ejemplo es la salsa de tomate passata di pomodoro (puré de tomate italiano) que se vende en Italia, precisamente para este fin. Se trata de una salsa de tomate consistente, que se cocina cuidadosamente para eliminar el exceso de agua y elaborar pizzas napolitanas perfectas.
¿Qué tomates utilizar para la base de la pizza?
Existe un tomate con Denominación de Origen protegida que es el más indicado para elaborar salsa de tomate artesana para pizza de estilo napolitano. Este es el tomate San Marzano. Aunque desde España puede ser complicado encontrarlo, así que otra opción es plantarlos en tu propio huerto urbano.
En cualquier caso, una alternativa al tomate San Marzano es el tomate en rama, cuando está en su punto exacto de maduración, lo más carnoso posible. Y en último caso, si no tienes tomates frescos, puedes optar por tomates enlatados, enteros o directamente jugo de tomate enlatado.
¿Salsa de tomate cocinada o cruda?
El principal motivo por el que cocinar la salsa de tomate es eliminar el exceso de agua. Como hemos dicho antes, la consistencia es importante en la elaboración de una salsa de tomate para pizza.
Por ejemplo, si usamos tomate pelado en lata o tomates frescos escaldados, podemos escurrirlos con un chino o colador para eliminar exceso de agua. O si en cambio usamos una salsa de tomate en lata, distinta a la passata di pomodoro, podemos cocinarla a fuego lento para quitar la mayor parte de agua.
Ingredientes para preparar salsa de tomate para pizza
La salsa de tomate clásica para pizza necesita pocos ingredientes, y además estos son muy sencillos de conseguir.
Para hacer esta receta, o cualquier otra receta de salsa de tomate para pizza, necesitarás lo siguiente: Tomates maduros, aceite de oliva, sal y pimienta, hierbas aromáticas (al gusto, puede ser orégano, albahaca y/o tomillo).
Añadir un poco de sal y pimienta, y aromatizar con albahaca fresca y orégano al gusto, será suficiente para conseguir la base de pizza perfecta. Por otra parte, no es necesario echar azúcar a la salsa de tomate, aunque esto sea algo habitual en España, para corregir la acidez del tomate.
Aunque hay que tener en cuenta que la receta de salsa de tomate para pizza dependerá de los tipos de pizzas que se vayan a hacer. Las pizzas napolitanas llevan una base de tomate diferente a las pizzas argentinas o a las pizzas de estilo New York.
Receta de salsa de tomate para pizza napolitana
Esta es una receta tradicional de salsa de tomate para pizza. Puedes preparar más cantidad de la que necesitas y almacenarla de manera adecuada, para que la siguiente vez que hagas pizza en casa, la tengas a mano.
Necesitarás:
- 2kg de tomates
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 10 hojas de albahaca o 12 si son pequeñas
- 1 cucharadita de café de sal (rasa)
- Opcional, 1 cebolla
- Limpia los tomates, córtalos por la mitad y quita las semillas.
- Pon los tomates en una olla, junto a una cebolla cortada finalmente, las hojas de albahaca y la sal. Cuece todos los ingredientes en agua, a fuego lento durante unos cuarenta minutos.
- Pasamos la mezcla por un pasapurés para quitar la piel de los tomates y se vuelve a dejar 40 minutos para que la textura se vuelva más densa.
- La salsa que no vayas a utilizar a continuación puedes conservarla al baño maría, en tarros de vidrio.
Salsa de tomate sin cocinar
Si lo prefieres, puedes hacer una alternativa de salsa de tomate para pizza sin cocinar, una receta más rápida, pero igualmente bastante resultona. En este caso necesitarás estos ingredientes:
- 700g de tomates frescos o dos botes de tomates cocidos y pelados
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Una cucharadita de café rasa de sal
- Si utilizas tomates frescos, tendrás que escaldarlos durante 5 o 10 segundos, y luego sacamos con una espumadera para quitarles la piel más fácilmente.
- Quitamos la piel de los tomates, los abrimos y les quitamos las pepitas para que la salsa quede fina. Puedes dejarlos en un escurridor hasta que pierdan el exceso de agua
- Añadimos un chorro de aceite, la sal y pasamos la salsa por un pasapurés. Otra opción es aplastar los tomates con las manos. Si sobra salsa, puede aguantar dos o tres días en la nevera, también puede congelarse fácilmente y utilizarse siempre que la necesites.
Conclusión
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